Quedé impactado cuando el presidente de ACPA en Ciego de Avila me comunicó el deceso de Tere la presidente de ACPA en Cuba,la Doctora en Ciencias Veterinarias Maria Teresa Planas Pérez, con la que compartí en los años Ochenta acciones de solidaridad en Etiopía y a partir de ese momento conocí una sincera amistad.
Me enseñó el arte de la dirección ganadera en Africa y su ejemplo y valor me iluminaron el camino de mi inexperiencia. Gracias Tere por tanto amor por lo que hicistes en vida, tus colegas, y amigos nunca te olvidaremos.Comparto a continuación con los lectores algunos datos de su fructifera vida laboral.
Según información de la periodista Mildred Obourque la Doctora Teresa Planas es fundadora de ACPA, donde ejerció varios cargos, hasta llegar a la presidencia en el 2005, cargo para el que fue reelegida sistemáticamente y ejercía hasta el momento de su muerte.
Comenzó su vida laboral en la Dirección de Genética Vacuna-Equina en 1968, al frente de proyectos genéticos de carne y doble propósito, hasta 1977. Luego se incorpora a laborar en el Instituto de Ciencia Animal en los temas de pequeños rumiantes y búfalos.
Se doctoró en 1976 en la entonces República Popular de Bulgaria y fue reiteradamente denominada como Cuadro destacado de la ACPA por 14 ocasiones consecutivas.
Recibió, además, numerosas condecoraciones, entre ellas las Medallas Conmemorativa Aniversario 40 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias; la Marcos Martí, del Sindicato Nacional de los Trabajadores Agrícolas y Forestales, y la de Trabajador Internacionalista que otorga el Consejo de Estado.
Fue una impulsora en el desarrollo de diferentes proyectos en beneficio de los criadores; en la creación de los Cotos de reserva genética, que buscan incentivar y preservar las razas autóctonas y en la labor por la equidad de géneros entre los asociados y asociadas a la organización.
Representó a Cuba en no pocos escenarios internacionales, defendiendo a la Revolución y trabajó intensamente con organizaciones no gubernamentales foráneas, para apoyar la capacitación y el desarrollo de proyectos que benefician a la agricultura y producción animal.
Esa fue Tere, como la llamamos cariñosamente: mujer de pequeña estatura, pero de una fortaleza tremenda en su corazón por la labor que amó. Se le podrá recordar de múltiples formas, pero yo prefiero hacerlo con su sombrero de vaquera en las ferias pecuarias, o mejor, con su buen sentido del humor para cada ocasión.
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